En general, los bebés de partos únicos (no gemelos ni trillizos) concebidos mediante reproducción asistida tienen peores resultados de salud que los bebés engendrados de forma natural. Sin embargo, esta diferencia es mucho más pequeña entre mujeres que han concebido tanto espontáneamente como por reproducción asistida, de acuerdo con los autores del estudio.
Éstos analizaron los datos de 2,456 mujeres que concibieron al menos un bebé de manera natural y otro por reproducción asistida, y los compararon con los de 1.3 millones de mujeres que habían concebido de manera natural y 8,229 mediante reproducción asistida.
Los investigadores hallaron que la concepción por reproducción asistida estaba asociada con un peso promedio al nacer 25 gramos más bajo, una gestación dos días más corta, un riesgo 26 por ciento mayor de tener un tamaño inferior a la edad gestacional y un riesgo 31 por ciento más alto de muerte perinatal.
Entre las mujeres que habían engendrado un bebé de manera natural y otro mediante reproducción asistida, las concepciones por reproducción asistida resultaron en bebés que pesaban nueve gramos menos y que con una gestación de 0.6 días más corta. Los bebés concebidos por ambos métodos eran casi igual de pequeños para la edad gestacional, pero los de concepción natural tenían un riesgo tres veces más alto de muerte perinatal que los de reproducción asistida.
"El peso al nacer, la edad gestacional y los riesgos de tener un menor tamaño para la edad gestacional, y el parto prematuro, no difirieron entre los bebés de mujeres que habían concebido tanto de forma natural como tras reproducción asistida", concluyeron en un comunicado de prensa la Dra. Liv Bente y colegas. "Las complicaciones de la reproducción asistida que observamos al comparar los resultados de la población general podrían atribuirse, por tanto, a factores como la infertilidad, en lugar de factores relacionados con la tecnología reproductiva".
El estudio fue publicado en línea en la edición del 30 de julio de The Lancet y se espera que aparezca en la próxima edición impresa de la publicación.
En un editorial que acompaña el trabajo, el Dr. Anja Pinborg, del Hospital Universitario de Copenhague en Dinamarca y colegas escribieron: "Considerando que entre un 1 y un 4 por ciento de los recién nacidos que vienen al mundo en Europa se conciben por la tecnología de reproducción asistida, la seguridad es importante. Reducir el número de partos múltiples ha conseguido mejoras, pero necesitamos tener una mejor comprensión biológica de las razones de por qué la infertilidad y la estimulación ovárica podría tener efectos adversos sobre la salud infantil. Por consiguiente, debemos monitorizar de manera continua los riesgos a corto y mediano plazo de la tecnología de reproducción asistida".
Desde Info7
No hay comentarios:
Publicar un comentario