El caso de la joven madre Michelle Wheatley, quien padece una enfermedad que no le permite más que comunicarse a parpadeos conmueve a Gran Bretaña. Aquí su historia de empuje y coraje.
La lucha por vivir plenamente que una persona da se convierte, muchas veces, en un emblema para otras miles. Ese es el caso de Michelle Wheatley, una madre inglesa de 26 años que padece el síndrome de Locked-in y que la ha dejado literalmente presa de su cuerpo.
Este mal, durante un año, ha ido paralizando poco a poco su cuerpo, dejándola totalmente lúcida, pero inmovilizada del todo. Es decir, puede ver, pensar y darse cuenta de todo lo que sucede, pero sólo puede parpadear para darse a entender, según detalla el periódico Daily Mail.
Pero como buena mujer, no se da por vencida y ha logrado elaborar, aún internada en el Hospital, una técnica personal para darse a entender y hasta regañar a su pequeño hijo de tres años Ryan, cuando se porta mal ¿Cómo se comunica? Tiene una tabla con cada letra del alfabeto, sus hijos muestran una letra y ella sube su mirada para sí y cierra sus ojos para no.
Hoy ella puede dar instrucciones sobre sus hijos o avisar si se siente bien o si tiene frío. Su pareja de 24 años dejó su trabajo de mecánico para cuidar sus hijos. Pero cuando a ella le den de alta, entrará a trabajar de asistente social. Ahí a la chica se le plantearán nuevos desafíos. ‘Ella quiere una vida más normal’ asegura.
Los médicos dicen que no es posible decir nada sobre su evolución, pero que ha ido mejorando. Los especialistas aseguran que puede aprender a manejar un computador que le ayude a comunicarse.
Se dice que el síndrome de Locked-in es como estar enterrado vivo. Existe un caso famoso en el mundo de un periodista francés que dictó su autobiografía, de gran éxito. En Chile el actor Alberto Vega fue conocido por este mismo mal.
Desde | Daily Mail
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