viernes, 23 de julio de 2010

Hospital español atrae partos de toda España

El hospital ha recibido este año 46 peticiones de fuera de su area de atencion. El hospital respeta el parto natural.
Hasta el Hospital de Jarrío llegan con bastante frecuencia las fotografías de bebés nacidos en este centro sanitario del occidente de Asturias. Es el testimonio de agradecimiento de sus padres por la atención recibida durante el embarazo y el parto. Muchas de estas fotografías proceden de fuera del área sanitaria y, en ocasiones, de fuera del Principado. Son instantáneas de niños nacidos en Jarrio, pero que viven en Lugo, Coruña, Madrid, León, Salamanca, Zamora, Huesca, Valladolid o Baleares.

Lo que tienen en común todos estos niños es que vinieron al mundo de la forma más natural posible. Sus padres eligieron para un momento tan especial el llamado parto natural. El Hospital de Jarrio lleva años ayudando a los padres en este proceso. Y, a juzgar por los datos estadísticos, el parto no medicalizado engancha. El Servicio de Atención al Usuario de este centro hospitalario reconoce que cada año recibe peticiones de mujeres de otras áreas sanitarias, e incluso de otras comunidades autónomas, para parir en Jarrio. Este centro atiende anualmente un volumen total de algo más de 300 partos. Pues bien, en 2009, por ejemplo, Jarrio recibió 65 peticiones de fuera del área sanitaria para dar a luz en este hospital del occidente asturiano. Este año se llevan ya recogidas 46.

Qué tiene Jarrio para que mujeres de Baleares o Huesca decidan trasladarse hasta allí para dar a luz? El doctor Rafael Maroto es el jefe del Servicio de Ginecología y Obstetricia del hospital. Siete ginecólogos --jefe incluido-- conforman la plantilla de especialistas de este centro. Maroto insiste en que, más allá de las modas mediáticas, el parto natural o no medicalizado se resume en algo tan sencillo como la atención individualizada, personalizada. Algo tan fácil de decir como, a juzgar por la práctica clínica de otros hospitales, difícil de realizar. Jarrio tiene mucha experiencia en el parto natural, de hecho, los lleva realizando desde la apertura del centro. Ahora, la Consejería de Salud pretende extender este modelo a todos los hospitales de Asturias.

La definición

"No es más que respetar el parto fisiológico siempre que sea posible", comenta Rafael Maroto cuando se le pide una definición del parto no medicalizado. El jefe de Ginecología de Jarrio recuerda las palabras de su profesor, el doctor Salvatierra, para explicarlo mejor. "La protagonista del parto debe ser la madre y el niño. Los profesionales estamos ahí para ayudar", comenta. No se trata, aclara este profesional, de una regresión, ni de volver a parir con dolor. "El principio es respetar la fisiología del proceso, informar a la mujer e ir actuando en función de las necesidades", añade.

Para eso es fundamental que el hospital, como en el caso de Jarrio, disponga de todos los recursos necesarios. Rasurado, episiotomía, enema, oxitocina, epidural --prácticas habituales en otros hospitales-- no forman parte de la rutina de la atención al parto en el occidente asturiano. Sin embargo, el jefe de Ginecología y Obstetricia, recuerda que el centro dispone de todos estos recursos por si fueran útiles en función de las necesidades de cada mujer. "Si una mujer llega dilatada igual no hace falta la epidural; si tiene mucho dolor, se puede recurrir a ella", comenta. Soluciones individuales para casos también individuales.

Y la fórmula debe funcionar. El Servicio de Atención al Usuario afirma que la mayoría de las mujeres de fuera que eligen Jarrio lo hacen por el boca a boca. Han oído a otras mujeres comentar su experiencia y se animan. Sólo así se explica que embarazadas tan geográficamente alejadas de Asturias como las baleares hayan elegido Jarrio para dar a luz a sus hijos. La solicitud puede pedirse y cubrirse ya por internet. El hospital citará, eso sí, a las mujeres para que acudan en la semana 38 de gestación, con todos los informes clínicos, para preparar el parto. Es el momento de conocer el centro y a los profesionales que las atenderán. Las embarazadas optan por trasladarse a Jarrio dos semanas antes de salir de cuentas. Se alojan en casas de familiares o amigos, en hoteles rurales o en viviendas alquiladas. Son las mismas mujeres de distintos puntos de España que expresan su agradecimiento, meses después, con el envío de las fotos de sus bebés que reciben en Ginecología.

Desde | La Voz de Asturias

La nota fue extraída del link anterior. Si tienes dudas o sugerencias sobre derecho de autor favor de remitirse a la liga mencionada con anterioridad.

1 comentario:

amoyag dijo...

Son un ejemplo para los hospitales, pero afortunadamente estos métodos no son tan escasos. La descripción que da el articulo encaja perfectamente co nuestra experiencia en el Hospital Costa del Sol de Málaga.

Aurelio